Las entidades financieras deberán aplicar desde hoy el Euribor de diciembre en las revisiones anuales de los préstamos hipotecarios, después de que el Boletín Oficial del Estado (BOE) publicase el pasado fin de semana la media del 3,452 por ciento adelantada el pasado viernes por el Banco de España.

De esta manera, las personas que tengan como referencia en la renovación de sus hipotecas la media del Euribor a 12 meses del mes anterior experimentarán en sus préstamos una rebaja cercana a los 115 euros (orientativa para un préstamo de 150.000 euros con un plazo de amortización de 25 años).


La aplicación del Euribor del mes anterior se llevará a cabo en todas las revisiones que se realicen en las próximas semanas, excepto en el caso de aquellas personas que hayan acordado otras condiciones diferentes con sus bancos.

Hasta ahora las entidades financieras esperaban a la publicación de la media mensual del Euribor en el BOE, que habitualmente se producía a finales de mes, para aplicar la rebaja a los consumidores.

El adelanto del dato beneficiará a los hipotecados

La decisión del Banco de España de adelantar la confirmación oficial de la media mensual del indicador a los días 1 y 5 de cada mes beneficiará a las personas que revisen sus hipotecas en los próximos días, ya que el Euribor, el tipo de interés al que los bancos se prestan dinero en la zona del euro, lleva descendiendo desde el pasado 10 de octubre de 2008.

El descenso responde a la política de recorte de tipos seguida por el Banco Central Europeo (BCE) para reactivar la economía y relajar el mercado interbancario, donde se calcula el indicador hipotecario.

Los analistas consultados por Efe esperan que el indicador, que cerró diciembre con una media del 3,452 por ciento tras experimentar su mayor caída mensual desde mediados del 2003, continúe bajando en las próximas semanas, acercándose al tipo de interés que fijó en diciembre el BCE, del 2,50 por ciento.

Además, el próximo 15 de enero el Consejo de Gobierno del BCE aprobará previsiblemente un nuevo recorte de tipos en la Eurozona de al menos un cuarto de punto, aunque algunos expertos apuntan que la rebaja puede ser de medio punto.