El Banco Central Europeo (BCE) considera que se aprecian signos crecientes de que la recesión global "toca fondo", aunque advierte de que la actividad económica probablemente será débil en lo que resta de año. "Aunque la incertidumbre todavía es alta, existen signos crecientes de que la recesión global toca fondo", afirma la entidad presidida por Jean Claude Trichet en su boletín mensual de agosto.

Coincidiendo con el mensaje de optimismo del instituto emisor de la zona euro, Francia y Alemania informaron hoy de que sus economías registraron un crecimiento del 0,3%, respectivamente, en el segundo trimestre del año, poniendo fin de esta manera a la recesión.

De este modo, el BCE señala que los últimos datos macroeconómicos y encuestas sugieren que la actividad económica durante lo que resta de 2009 se mantendrá débil, aunque afirma que el ritmo de la contracción "claramente se está reduciendo".

Así, la institución augura que en 2010, tras una fase de estabilización, se producirá una recuperación "gradual" en la que se registrarán crecimientos trimestrales positivos, y apunta que las significativas políticas de estímulo deberían respaldar el crecimiento de la economía global.

En lo que respecta a los precios, los datos disponibles constatan que las expectativas de inflación a medio y largo plazo permanecen firmemente ancladas en línea con el objetivo del Consejo de Gobierno del BCE.