"Veremos. Algunos han puesto el cargo antes del interés nacional", comentó a la prensa el líder del partido de extrema derecha LAOS, Yorgos Karatsaferis, el único de los cinco jefes de los partidos parlamentarios presentes en la reunión que hizo declaraciones inmediatas, según informaciones de EFE.
 
    La reunión a puerta cerrada en el palacio presidencial, que duró tres horas y media, tenía como objetivo buscar el consenso y la cohesión nacional para afrontar la profunda crisis económica del país, pero los primeros indicios apuntarían a un fracaso.
 
    Se espera que el resto de los líderes hagan declaraciones en el Parlamento en las próximas horas, informó el canal estatal NET.
 
    Los socios europeos han presionado al Gobierno griego para que consiga una completa cohesión de apoyo a la implementación de un nuevo y severo programa de recortes, aumentos fiscales y privatizaciones.
 
   Esa cohesión, que requeriría un consenso político, es considerada necesaria para convencer de que el plan surtirá el efecto deseado y Grecia podrá superar la crisis y devolver puntualmente la ayuda recibida; por lo que es requisito para que la zona euro y el Fondo Monetario Internacional (FMI) continúen otorgando los préstamos prometidos en 2010.
 
    Ese gigantesco rescate, pactado por un periodo de tres años, fue condicionado a severas reformas y ahorros del Estado, para que Grecia no quiebre.