Asimismo, la empresa con sede en Chicago plantea posibles operaciones de compra tras su reducción en costes en investigación y desarrollo y, tras haber pagado algunas de sus deudas, según ha dicho el director financiero de la compañía, James Bell
, en una conferencia. El dividendo podría subir de 42 céntimos a 43,25 el año que viene como se desprende de un análisis de Bloomberg.

“Nos gustaría volver a lo que hacíamos antes de dar un gran dividendo y, ahora que tenemos liquidez, lo vamos a hacer” ha declarado Bell a los inversores.

Boeing espera entregar su primer 747-8 a mediados de año y el primer 787 Dreamliner en el tercer trimestre. Los planes llegan con retraso y con un gran sobrecosto tras tener la compañía problemas con los materiales y los procesos que han utilizado.

Boeing asciende un 1,57% y sus acciones alcanzan los 72,98 euros por acción