Berkeley versus PSOE y Podemos. Así se plantea la batalla legal a la que se enfrenta la compañía minera australiana ante la enmienda implementada en la ley de Cambio Climático por los grupos parlamentarios que representan a los dos partidos que gobiernan España. Esta enmienda lo que pretende es acabar con la investigación y el aprovechamiento de minerales radiactivos, como el caso del uranio y evitar, al final, la apertura de la mina que pretende la compañía.
Recordemos que los numerosos pasos dados por Berkeley Energía en los últimos años se ha enfrentado a centenares de adjudicaciones individuales, en una maraña de permisos que han superado incluso al CSN, el Consejo de Seguridad Nuclear. Ahora, en la última fase, la decisión de la apertura de su mina de uranio en Retortillo, Salamanca, depende del ministerio de Transición Ecológica que dirige Teresa Ribera, quien se apone a la construcción de la mina. Y está a la espera del nuevo informe del CSN sine díe y que ahora entronca con la tramitación de la ley climática en las Cortes.
Con este panorama el valor ha ido, en su volatilidad extrema presa además de los especuladores, perdiendo buena parte de lo cosechado a lo largo del año. Su cotización actual se encuentra más de un 150% por debajo de los máximos del ejercicio y su situación de avances, que todavía rozan el 100% en lo que va de año, ha perdido más que fuerza hasta relegarle al quinto mejor valor del presente ejercicio bursátil, destronado por PharmaMar.
Pero aunque desde mediados de octubre ya no ocupa el trono bursátil, lo cierto es que paralelamente en esas fechas, su inclusión en el Ibex Small Caps propició un repunte superior al 18% al valor. Sin embargo en el último mes esas noticias negativas colocan las pérdidas de Berkeley por encima del 35%.
Berkeley por tanto se atrincherará en los tribunales, al entender, como ha señalado en la nota remitida a la CNMV, que posee “derechos legales válidos y consolidados” para investigar y explotar sus proyectos de minería ante la concesión de su licencia de 30 años en Salamanca. La compañía ya ha contratado los servicios legales del bufete británico australiano Herbert Smith, que ya le asesoraba en España, para que se encargue de su caso. Y es que esta firma conoce bien los entresijos de la administración ya que asesora legalmente a la abogacia del Estado en pleitos de renovables como publica La Información.
Ahora todo pasa por esperar sobre el proyecto, con el trámite parlamentario de la normativa y la mirada al ministerio de Transición Ecológica y el informe pertinente del Consejo de Seguridad Nuclear.
En cuanto a sus indicadores técnicos premium, Berkeley ha minimizado su puntuación, que ahora alcanza los 6 de los 10 posibles en nuestra clasificación. Con parámetros mixtos que van desde la tendencia alcista a largo plazo, el momento total lento positivo y el volumen en sus dos vertientes, tanto a medio como a largo plazo creciente, hasta la tendencia a medio plazo bajista, el momento total rápido negativo y la volatilidad, en ambos casos, creciente.