Berkeley Energia, tal y como se esperaba, centra en una batalla jurídica, en los tribunales, el contencioso por la negativa del gobierno del PSOE y Podemos a la apertura de la proyectada mina a cielo abierto de uranio en la localidad salmantina de Retortillo, con la interposición de un recurso contencioso-administrativo por parte de la compañía ante la Audiencia Nacional.
Todo ello, tras la denegación del recurso por parte del Ministerio para la Transición Ecológica por la denegación de la autorización para construir la planta de concentrado de uranio en Salamanca, ante la idea de seguir defendiendo su posición, tal y como ha comunicado a la CNMV, la Comisión Nacional del Mercado de Valores.
De hecho, Berkeley Energía, en su comunicado, destaca que la desestimación del Ministerio que dirige Teresa Ribera, a su solicitud no ha seguido “el procedimiento legalmente establecido”, incluyendo los denominados informes de mejora que complementaron la presentación, con lo que arguye que el rechazo “no es legal”. Destaca que “la Compañía y BME continuarán defendiendo firmemente su posición y tomando todas las medidas necesarias para preservar sus derechos”.
A pesar del recurso presentado, la compañía destaca que está dispuesta a colaborar con las autoridades, y señala que “mantiene la esperanza de que la situación de permisos pueda resolverse de forma amistosa”, a pesar de abrir claramente el litio a los juzgados.
Una presentación, que no sentaba bien a su cotización en la última semana, a pesar del rebote que se registraba el pasado jueves en su cotización, ya que, en los últimos cinco días bursátiles, sus acciones ceden un 5%, que se convierten en pérdidas del 0,62% en el mes precedente. Todo ello a pesar de que sus ganancias anuales superan el 33,2%. El valor mantiene en niveles interanuales caídas del 20% pero se revaloriza casi un 119% en el cómputo de los tres últimos ejercicios
Recordemos la última fase de este contencioso se libraba a finales del pasado ejercicio, cuando Berkeley energía abría la puerta al arbitraje contra el gobierno, ante la situación de impás, con ese no del ministerio tras un informe muy desfavorable del consejo de Seguridad Nacional, en julio de 2021 a la apertura de la mina de uranio.
Pero en paralelo, la guerra de Rusia contra Ucrania abría la puerta a las energías alternativas tras la subida hasta rozar los 140 dólares por parte del petróleo, y la reactivación en Francia del concepto de la energía nuclear, sembró de compras al valor, que se han prolongado incluso en el presente ejercicio, con ese crecimiento a doble dígito que todavía se mantiene en la cotización del valor.
En cuanto a su desempeño técnico, las acciones de Berkley Energía reciben una calificación actual de neutral por parte de los Indicadores de Fuerza Premium que elabora Estrategias de Inversión, que se reduce desde fuerte. A medio plazo, se mantiene muy débil, mientras que, a largo plazo, se mantiene muy fuerte. En la operativa, búsqueda de figuras de vuelta alcista, con riesgo de perforación de soportes secundarios para el valor.
Además, sumamos que el valor ha presentado resultados del último semestre de 2022, con pérdidas que alcanzan los 849.000 dólares frente a las ganancias que indica de 63,8 millones de dólares en el mismo periodo del ejercicio precedente.