La aportación belga se divide a partes iguales entre el Gobierno central, las tres regiones del país y los accionistas institucionales de la entidad (1.000 millones de euros cada parte).Las regiones se repartirán su contribución en función de su riqueza (Flandes, 500 millones; Valonia, 350 y Bruselas, 150 millones). Esta participación regional se consideró necesaria porque Dexia es un banco especializado en la financiación a las entidades locales.Los accionistas institucionales son el grupo inversor Arcofin, el banco asegurador Ethias, y Holding Communal, otra institución especializada en el crédito a entidades locales.Aportación francesaLa aportación francesa se hará a través de la Caisse de Depots et Consignations (CDC), el organismo estatal francés que reúne participaciones empresariales y que tiene poco más del 10% del capital de Dexia.Como comparación, la intervención de Bélgica, Holanda y Luxemburgo en el banco-asegurador Fortis supondrá la inyección de 11.200 millones de euros a cambio del 49% del capital.El primer ministro Leterme ya había avanzado el lunes por la tarde que la situación de Dexia era "diferente" a la de Fortis, pero garantizó que, en caso de problemas, el Gobierno asumiría "su responsabilidad".Los detalles del plan se anunciaron tras una reunión que se prolongó durante toda la noche en las oficinas del primer ministro, después de que a última hora de la tarde del lunes el propio Leterme anunció que había un principio de acuerdo.La radio pública francófona (RTBF) señaló que uno de los principales obstáculos en esas negociaciones fue el futuro de la filial estadounidense de Dexia, y que no se ha especificado todavía.
Ampliación de capitalLa ampliación de capital de Dexia "es una operación que permite garantizar los depósitos", afirmó de forma optimista el viceprimer ministro y titular de Finanzas, Didier Reynders, quien destacó que la capitalización "se hace con los accionistas existentes"."Hay un compromiso de tomar las medidas necesarias para garantizar la gestión del grupo", recalcó Reynders.El presidente de la región de Flandes, Kris Peeters, señaló desde Japón, donde realiza un viaje oficial, que su ejecutivo apoyará el plan de salvamento de la entidad. "Flandes está dispuesta a ayudar a restaurar la confianza", afirmó Peeters, citado por la agencia Belga.

