El consejero de Economía y Hacienda, Carles Manera, ha anunciado esta decisión después de que este lunes se vendiera la mitad de los 200 millones puestos a la venta, con el fin de paliar la restricción de crédito por parte de las entidades financieras.
 

El ejecutivo Balear no emirirá más de 300 millones de euros de deuda pública, a pesar de que la Comunidad tiene permiso para endeudarse en 371 millones de euros, de forma que los 71 millones restantes se refinanciarán a través de los mecanismos convencionales.