BAA, propiedad de la compañía de infraestructuras española Grupo Ferrovial, afirmó que las cifras están en línea con la tendencia a la baja registrada desde el pasado diciembre, y demuestran que la demanda siguió siendo débil y que las condiciones parecen no haber cambiado sustancialmente.


Heathrow, uno de los aeropuertos con mayor tráfico de pasajeros del mundo, registró una caída del 3,9% en mayo con respecto a un año antes. A pesar de ello, el descenso es el menor de los siete aeropuertos en los que BAA opera en el Reino Unido.


Stansted, uno de los aeropuertos que el regulador de la Competencia ha obligado vender a BAA, registró la mayor caída en el tráfico de pasajeros, del 18,5%, después de que algunas aerolíneas como Ryanair Holdings decidiesen reducir su capacidad.

El tráfico de pasajeros del aeropuerto de Gatwick, actualmente en venta, bajó el 6,5% aunque la caída es menor que en meses anteriores, señaló BAA.

El aeropuerto de Edimburgo fue el único que aumentó el tráfico de pasajeros, impulsado por las operaciones de nuevas aerolíneas de bajo coste. El tráfico en este aeropuerto creció por segundo mes consecutivo.