Almirall se ha convertido en uno de los valores españoles más relevantes durante la última semana, ya que se trata de la nueva incorporación del Ibex 35 a partir del 22 de junio, tras la salida de Mediaset.
El sector salud se ha revelado como uno de los más resilientes ante la crisis del Covid-19, lo que se ha traducido en anuncios como esta nueva entrada en el selectivo, que hasta ahora sólo tenía a Grifols como representante del sector. La farmacéutica, especializada en tratamientos contra problemas dermatológicos como la psoriasis o la dermatitis, posee una capitalización que ya supera los 2.100 millones de euros, por lo que se encontraba como la candidata mejor posicionada para entrar en el Ibex 35 debido a su volumen de negociación.
Si nos fijamos en su cotización, Almirall se encuentra entre las pocas compañías que no han sufrido grandes reveses este 2020. Tras comenzar el año por encima de los 15 euros por acción y llegar a perder los 9 a mediados de marzo, en las últimas jornadas en bolsa ha logrado situarse en torno a los 12 euros, dejando ya muy atrás sus niveles de soporte, establecidos actualmente en los 8,80 euros.
Aunque la firma ya se encontraba entre las favoritas para optar a este puesto en el Ibex 35, lo cierto es que ha cedido más de un 21% en el año. Muy lejos queda la revalorización al alza del 60% que experimentó en el año 2018. No obstante, el pasado ejercicio logró un beneficio neto de 106 millones de euros, lo que supuso un 36% más que el anterior. Además, en el primer trimestre de este año su beneficio ha crecido un 62% hasta los 48 millones de euros, superando sus previsiones, debido al acopio de medicamentos que los mayoristas y ciudadanos han hecho ante la crisis sanitaria.
Respecto a su dividendo correspondiente al ejercicio 2019, la compañía ha acordado por tercer año consecutivo la posibilidad de que sus inversores lo reciban en efectivo (0,203 euros por título) o a través de acciones nuevas con el mismo valor. La rentabilidad por dividendo, en caso de elegir el pago en efectivo, será del 1,4%, y deberá abonarse antes del 30 de octubre.
El consenso recomienda su compra
De hecho, el buen estado a nivel fundamental de la compañía provoca que el consenso de analistas se incline por comprar o sobreponderar los títulos de Almirall. Respecto al consenso de analistas consultados por Reuters, consideran su precio medio objetivo en 17,20 euros, y todos ellos se inclinan por comprar sus acciones.
José Antonio González, analista técnico de Estrategias de Inversión, explica que Almirall “avanza con fuerza superando la directriz decreciente que parte desde los máximos de mayo, situada en los 13,76 euros por acción”. Asimismo, “su oscilador Estocástico se aproxima a una pronta señal de compra, que habilitaría a la cotización a atacar la resistencia intermedia de los 13,76 euros”.
Almirall en gráfico diario con Actividad de contratación (ventana con fondo azul), oscilador Estocástico (ventana con fondo verde) y Rango de amplitud medio (ventana con fondo amarillo)
Por su parte, nuestros indicadores técnicos no le otorgan una buena puntuación, concretamente de 2 sobre 10. La compañía, por el momento, logra una tendencia alcista en el medio plazo, pero se modifica a bajista en el largo. Además, su volumen es decreciente, y su rango de amplitud, que refleja la volatilidad, se sitúa creciente tanto en el medio como en el labrgo plazo.
