Navío subrayó que, según va pasando el tiempo, la crisis en el sector "se agranda", por lo que no descarta "nuevas regulaciones de empleo en otras compañías aéreas españolas".Entre esas medidas destacan la reducción de las tasas de navegación aérea y aeroportuarias, así como las de oficinas, locales, mostradores y aparcamiento en aeropuertos.Las compañías piden también que el Estado sufrague los costes de seguridad (como hace en el caso del tren AVE) y programas de agilidad en la tramitación de licencias.Plantea además que haya más competencia entre los suministradores de combustible; racionalizar el espacio aéreo español; crear grupos de trabajo con AENA y el Ministerio de Fomento; reducir las cotizaciones sociales, y establecer incentivos fiscales para las compañías.Encarecimiento de los billetesEl presidente de esta patronal no descartó que se puedan producir nuevos incrementos en el precio de los billetes a causa del alza del combustible, aunque señaló que estos incrementos deberían estar "muy bien" graduados porque "se está notando una reducción en el número de pasajeros", por lo que "tendrán que buscar un equilibrio" entre las dos variables.En el marco internacional, recordó Navío, veinticinco compañías aéreas han dejado de operar o han entrado en concurso de acreedores, y grandes compañías americanas y europeas ya han anunciado planes de reducción de capacidad.En España, Spanair ha anunciado un plan de viabilidad para "afrontar la crisis económica y la escalada del precio del combustible", que contempla la reducción de capacidad, flota y plantilla. Los despidos, según las cifras dadas por la dirección de la aerolínea a los sindicatos, afectarían a unos 1.100 trabajadores, de ellos, 710 de tierra y otros 340 de vuelo.