El presidente de Estados Unidos cumple un año al frente de la Casa Blanca con luces y sombras. Lo peor llega de sus niveles de aprobación popular, entre los más bajos desde su llegada, con encuestas en las que, de media, no llega al 43% Y lo peor es que sus cifras se mantienen por debajo de la mitad de la población a favor desde nada menos que agosto. Eso sí, mejoran las de Donald Trump en ese momento: con apenas un 39% de aprobación.
De momento la principal preocupación de los estadounidenses sigue siendo la economía, con 19 semanas consecutivas como el asunto que más interesa y preocupa a la población, seguido de la salud pública, los cuidados sanitarios el medio ambiente y, en menor medida, el crimen, como vemos en la encuesta de Reuters/Ipsos.
Algo que también se refleja en otras encuestas como la 25ª de los CEOs globales de PwC que muestra como el optimismo es claramente decreciente ante la recuperación económica entre los directivos estadounidenses: solo 7 de cada 10 piensan que 2022 será mejor ejercicio, frente a casi 9 de cada 10 que lo pensaban el pasado año.
Eso sí no se puede negar que resulta paradójico, aunque quizá no en plena pandemia, que el principal quebradero de cabeza sea también uno de los grandes logros en la recuperación de este primer año de Biden en la Casa Blanca como tuiteaba POTUS al cierre de 2021
Con buenas previsiones de crecimiento, aunque con una inflación descontrolada en el 7% que va a obligar a ese cambio de sesgo de la FED antes de lo esperado. No solo la retirada de estímulos, sino también y, sobre todo, la subida de tipos, hasta cuatro que prevén las grandes casas de análisis al otro lado del Atlántico este año, empezando ya en este mes de marzo.
Con avances del 5,5% en el PIB estadounidense, el mayor como sacaba pecho Biden desde hace más de cinco décadas, ya que solo se recuerda el 5% de crecimiento de la economía norteamericana en una administración demócrata en los tiempos de Jimmy Carter allá por el año 1977. Con desempleo en el 3,9% de la población activa pero solo sumando 199.000 nuevos empleos en diciembre y creciendo entre las mujeres afroamericanas hasta el 6,2%, en plena variante ómicron.
Pandemia que ha forjado dos de sus principales logros en el universo económico en este su primer año de mandato con una serie de paquetes legislativos para combatir la debilidad arrastrada por la Covid, con ayuda financiera directa en forma de cheque para los ciudadanos y la famosa ley de infraestructuras de 1,2 billones de dólares.
Pero lo realmente significativo es el buen comportamiento bursátil en lo que llevamos de presidencia de Joe Biden, que sin embargo tiene dos periodos claramente diferenciados, hasta fin de año y en lo que llevamos de 2022. Aun así, en este año, el desempeño de los principales indicadores americanos arroja un avance del 20,5% para el S&P500, del 14,35% para el Dow Jones y del 9,92% para el Nasdaq.
Y Joe Biden, al cierre de 2021, podía presumir de alcanzar el mejor desempeño del S&P500 de un demócrata desde el primer mandato de Barack Obama en busca de la salida de la recesión junto con él de vicepresidente. El desempeño medio del primer año de un presidente demócrata para su primer año de presidencia es de un 14,2% de promedio, frente a la pérdida del 1,2% para los presidentes del partido republicano
Sólo con un S&P que ha alcanzado nada menos que 70 máximos en el pasado ejercicio, es el segundo número más alto de récord históricos desde 1995, cuando el índice alcanzó 77 máximos para el indicador de referencia estadounidense.
En la comparativa, durante el primer año de Donald Trump en el cargo en 2017, el S&P 500 registró 62 máximos históricos. Y así, dicen los expertos bursátiles es como se mide al otro lado del Atlántico y el año bursátil del presidente, más que por sus avances acumulados como hacemos en Europa.
