Los resultados de las elecciones de Georgia dejan un Senado dividido al 50% que los demócratas controlarán, debido al voto de desempate en la vicepresidenta electa Kamala Harris. Los inversores creen que el hecho de que los demócratas controlen ambas cámaras puede suponer un gran estímulo fiscal a corto plazo, aunque también un aumento de la regulación en las compañías tecnológicas, lo que penaliza en gran medida al Nasdaq.
El índice de referencia de las empresas de pequeña y mediana capitalización, el Russell 2000, subió un 4% este miércoles para superar el nivel de 2.050 puntos con la esperanza de un mayor estímulo fiscal. El Russell 2000 cotiza en máximos históricos desde noviembre como sus pares de gran capitalización y está en subida libre por análisis técnico. En 2020 se revalorizó un 18,36% -un 8,36% teniendo en cuenta el factor euro-, sólo por detrás del 43,64% del Nasdaq y por delante del 16,26% del S&P 500 y el 7,25% del Dow Jones.
“Los 2.456 puntos son un objetivo teórico máximo dentro del canal alcista en el que cotiza el Russell 2000. Un índice como el Russell 2000 aporta diversificación por sectores, aunque los llamados a subir con fuerza son las renovables, las constructoras y los materiales básicos bajo el mandato de Joe Biden”, indica el analista de IG Sergio Ávila.
Este objetivo teórico le da un potencial alcista cercano al 18% en este comienzo de enero. El Russell 2000 acumula un alza del 106% desde los mínimos de marzo cuando llegó a los 1.014 puntos.
Un escenario de mayor crecimiento económico beneficia también al Russell 2000 si además se parte de un escenario de menor incertidumbre como parece que va a ser 2021 frente al año que acaba de terminar.
“Históricamente, las empresas de pequeña capitalización han tenido un peso mayor al ciclo económico, por tanto un escenario de crecimiento es positivo para este segmento. Las empresas de pequeña capitalización también se han beneficiado del apetito del riesgo por parte de los inversores”, explica Bill Hench, gestor del fondo Legg Mason Royce US Small Cap Opportunity de Franklin Templeton.
Hench se queda con algunas compañías como la tecnología, las empresas de semiconductores y componentes electrónicos, además de valores de consumo e industriales ligadas al ciclo. “No creemos que se necesite un plan de estímulo muy grande para generar mejores resultados económicos. Tratamos de seleccionar a las empresas de pequeña capitalización a las que les irá bien con o sin un estímulo importante”, añade.
Entre las principales posiciones del fondo se encuentran Alpha & Omega Semiconductor, la empresa de marketing digital Magnite, la red de hospitales privados Community Health Systems, la financiera B. Riley Financial, la empresa de logística sanitaria Owens & Minor y la compañía de leasing de aviones Air Lease.
Un dólar débil
El dólar se ha depreciado un 8,45% este 2020 frente al euro. Un contexto de debilidad de la divisa es positivo para las grandes exportadoras, sin embargo las ventas de las compañías del Russell 2000 llegan en gran medida del mercado interno estadounidense. Por tanto, un dólar débil no sería, en principio, un catalizador para invertir en el índice Russell 2000.
“Algunas empresas tienen un alcance global o están vendiendo a empresas estadounidenses que hacen negocios a nivel mundial por lo que tenemos posiciones que podrían aprovecharse si el dólar continúa debilitándose para incrementar sus exportaciones”, cuenta Hench.