El desfase de las televisiones autonómicas continúa. Parece que Canal Sur no ha aprendido nada en estos siete años de crisis, que se han llevado por delante a Canal 9 y que han dejado al borde de la quiebra a Telemadrid, y sigue con un importante déficit presupuestario.
Las últimas cuentas remitidas por la sociedad al Registro Mercantil de Sevilla reflejan que la televisión pública andaluza facturó 16,06 millones por publicidad y prestación de servicios en 2013, mientras que desembolsó la friolera de 50,56 millones en gastos de personal, según datos recogidos por El Confidencial.
¿Cómo se financia entonces? La respuesta es obvia: Canal Sur tira del dinero público para sufragar el desfase. Según el portal, Canal Sur recibió el año pasado 95,03 millones en concepto de subvención, importe que no impidió que registrara unas pérdidas de 15,42 millones.
Ante esta situación la Junta de Andalucía tuvó que volver a dar un paso al frente para garantizar la supervivencia de la cadena pública. La situación era tan peligrosa que, según cuenta El Confidencial, la auditora de la televisión andaluza reclamaba a gritos la entrada de fondos públicos al constatar que las pérdidas del ejercicio habían generado un patrimonio neto negativo, escenario que sitúa a cualquier sociedad en causa de disolución si no se toman medidas, y un fondo de maniobra teñido de rojo, augurio de graves tensiones de caja.
Lo cierto es que Canal Sur cuenta, por ahora, con el apoyo del Ejecutivo de Susana Díaz, pero algún día la Junta de Andalucía se verá obligada a “cortar el grifo”.
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