El ex primer ministro italiano, Silvio Berluconi, ha visto cómo su pena de prisión de un año ha sido conmutada por servicios a la comunidad para el cuidado de ancianos.

A los 77 años, el multimillonario, cuya sentencia por fraude fiscal fue confirmada el año pasado por el máximo tribunal de Italia, tendrá que trabajar al menos cuatro horas a la semana en un lugar por determinar, según un comunicado de la corte de Milán recogido por Bloomberg.

Era poco probable que Berlusconi ingresara en prisión debido a su avanzada edad y los jueces han optado finalmente por asignarle el servicio comunitario en lugar de obligarle a cumplir la condena bajo arresto domiciliario.

N.A.