La contrucción de nuevas viviendas se incrementó en un 0,9% en una tasa anual ajustada estacionalmente de 891.000 unidades. En julio las cifras fueron revisadas a la baja para mostrar un nivel de 883.000 unidades, en detrimento de los informes anteriores que lo situaban en 896.000 unidades.
El consenso de expertos, había estimado que los datos se encontrarían en torno a una tasa de 917.000 unidades el mes pasado. Por tanto, los resultados han estado por debajo de lo que se esperaba y el sector de la vivienda no avanza del todo al ritmo que se esperaba para muchos analistas quedando ligeramente estancado con respecto a los números de julio.
Este resultado tiene relación directa con la caída de las peticiones sobre las viviendas multifamiliares, que se desplomaron un 11,1%, lo que supone una tasa de 263.000 unidades. Por otro lado, las solicitudes sobre viviendas unifamiliares, el mayor segmento del mercado, han aumentado un 7%, a un ritmo de 628.000 unidades, la más alta desde febrero.
Esta caída del sector multifamiliar podría estar directamente relacionada con el incremento de las tasas hipotecarias, lo que podría estar retrasando la construcción de nuevos proyectos. El nivel de las hipotecas más alto ha frenado el ritmo de venta de nuevas casas, pero se espera que la demanda de alojamiento, continúe su recuperación desde los mínimos en varias décadas para mantener la construcción de viviendas. (Ver: Bancos en EE.UU. comienza la competición por los minoristas)
Las tasas hipotecarias han subido a la espera de que la Reserva Federal reduzca los 85.000 millones de dólares en bonos que está comprando cada mes para mantener los tipos de interés bajos. Los economistas creen que la FED hará un anuncio sobre el futuro del programa al final de la reunión. (Ver: ¿Qué espera a los mercados tras el tapering?
