Dicen que para estar en bolsa, hay que ser algo arriesgado. Pero para entrar en Banco Popular, con lo que ha pasado, hay que tener corazón de acero. Ya decían entonces, a finales de 2012, que la ampliación de Banco Popular derivaría en una entidad sólida y solvente. Claro que el motivo por el que llevó a cabo esta operación