Uno de los grandes protagonistas de este año es la bolsa alemana . Con una economía boyante y una continua entrada de capital en los fondos de inversión alemanes, esta categoría ha experimentado uno de los mejores comportamientos del mercado, alcanzando una rentabilidad media del sector del 21% a un año. En 2007 parece que van por el mismo camino, puesto que desde comienzo de año la media de la categoría ha obtenido una rentabilidad del 14%.Situación Económica de Alemania: La economía alemana ya está mostrando su fortaleza de forma robusta, después de algunos años con un crecimiento muy ralentizado, y una tasa de paro en niveles tan sólo alcanzados después de la II Guerra Mundial. Sin embargo, en 2006 la economía alemana creció a su tasa más acelerada desde 2000, tendencia que además se espera continúe, con estimaciones de crecimiento del PIB del 1,5% en 2007, y del 2% para finales de 2008. En enero de 2007 se implantó una reforma del IVA (al alza), que trajo cierto recelo sobre la inversión en Alemania, al crear desconfianza sobre el impacto que ésta podría tener en la recuperación de la economía más potente de Europa. Pero nada más lejos de la realidad; el primer trimestre de 2007, Alemania ha registrado un crecimiento del PIB del 3,3%, muy por encima de las estimaciones del mercado cifrada en el 2,7%. Además, la última publicación de IPC registrado en abril, muestra un control de precios, indicando una desaceleración de la inflación en el segundo trimestre del año, aunque los expertos aclaran que el panorama inflacionista aún habiendo mejorado, no está exento de riesgos. Esta salud económica se ha trasladado a la confianza económica. La confianza del inversor subió de forma notable en marzo, y el índice ZEW (confianza de inversión) se duplicó en marzo. La confianza del consumidor, apoyada por el mercado laboral, también mejoró durante el primer trimestre del año. Entre los riesgos económicos actuales destaca por un lado el impacto de la ralentización del crecimiento mundial en la exportación (uno de los principales vehículos de crecimiento de la economía), y por otro el elevado precio del petróleo, que encarecería la Balanza Comercial, por un mayor costes en las importaciones.