La decisión del gobierno de China de rechazar la invitación de la Administración Trump de reiniciar las conversaciones en materia comercial volvió a poner este conflicto en el foco de los inversores, provocando la caída generalizada de los mercados de valores occidentales. En este sentido, China volvió a insistir ayer que no negociará bajo presión y que sólo volverá a hacerlo si observa “sinceridad” en los planteamientos de EEUU. Cabe recordar que ayer entraron en vigor nuevas tarifas impuestas por EEUU a 200.000 millones de importaciones chinas, así que como las establecidas por China como respuesta sobre 60.000 millones de dólares de importaciones estadounidenses.
De este modo, la inquietud que genera la posibilidad de este conflicto que, de momento, parece manejable y cuyo impacto en las economías mundiales ha sido muy limitado, termine derivando en una guerra comercial a gran escala volvió a lastrar el comportamiento de las bolsas mundiales.
Pero en la sesión de ayer hubo otros factores que también influyeron en el comportamiento de los mercados financieros. Así, la intervención de Draghi ante el Comité Económico y Monetario del Parlamento Europeo dio más juego del esperado. El BCE ha reconocido que empieza a observar un repunte “vigoroso” de la inflación subyacente en la región del euro. Declaraciones que tuvieron efecto en los bonos, que se giraron a la baja, rentabilidades al alza, euro al alza y valores de corte defensivo a la baja.
En Reino Unido también hubo novedades después de que la primera ministra británica, Theresa May, insistiera en su plan para el Brexit contra viento y marea. Además, las presiones de las formaciones populistas que forman el Gobierno de Italia insistiendo para que el ministro de finanzas Tria acceda a incrementar el déficit público cuando se presente el presupuesto 2019 este próximo jueves.
A eso se suma el inicio de la reunión de dos días de la Reserva Federal en el que se da por descontado que suba un cuarto de punto los tipos de interés. Una decisión que, aunque está descontada por los mercados, no lo está tanto una potencial subida de las tasas en el próximo mes de diciembre.
En el ámbito corporativo, Next ha publicado cifras del primer semestre fiscal y ha subido estimaciones para el ejercicio completo. Las ventas alcanzaron los 1.960 millones de libras, beneficio antes de impuestos de 311.1 millones y la compañía ha propuesto un dividendo de 55 peniques por acción al tiempo que reconocen que el mercado británico se mantiene volátil.
Empresas protagonistas en la sesión
Kone, en el seno de la celebración de un Capital Market Day, ha mantenido los objetivos financieros y estratégicos sin cambios. La compañía está tomando decisiones en precios y mejoras de productividad. Por otro lado, Kone ha conseguido un contrato para equipar la segunda fase del metro oeste finlandés.
La compañía norteamericana, Michael Kors, ultima la compra de Versace por 1.700 millones de euros. Una estrategia que encaja dentro del interés estratégico de la compañía por reforzar su gama de lujo. Versace ha estado estudiando su salida a bolsa después de que Blackstone tomase, en 2014, una participación del 20% para financiar su expansión internacional.
Se comenta en distintos medios que los recortes previstos por Siemens en Alemania serán inferiores a los inicialmente previstos. En concreto, se eliminarán 2.900 empleos frente a los 3.400 estimados anteriormente.
Bloomberg ha hecho público que la compañía norteamericana LIBERTY GLOBAL reconoce que busca oportunidades en Suiza. Se especula con una posible oferta sobre Sunrise Communications, al reconocer el CEO de Liberty que “es una opción”.
Y en medio del cruce de acusaciones mutuas entre Carrefour y Casino sobre su hubo o no negociaciones preliminares de fusión entre ambas compañías, ambos valores cotizan con caídas. En Alphavalue creen que quizás Casino “ha perdido una oportunidad de salir a flote”.
Las acciones de la compañía británica de broadcasting sube hoy ligeramente tras anotarse ayer un +8,61% después de que se haya resuelto la subasta a favor de Comcast , que se impuso a Fox en la lucha por Sky, valorando la compañía británica en 30.600 millones de libras. Sky cerró ayer a 17,215 libras/acc respecto a la oferta de Comcast que ha ofrecido 17,28 libras. Fox ha señalado que aún está valorando qué hacer con el 39% de participación que ostenta en Sky.