Se trataba de una semana que la mayoría había marcado con una equis en el calendario. El BCE se reunía para tomar decisiones en cuanto a los tipos de interés y otras medidas no convencionales para estimular la subida de la inflación en la eurozona, además de favorecer el crédito a las pymes.
Finalmente, Mario Draghi salió a escena para anunciar una batería de medidas que iban desde los tipos de interés al 0,15% hasta cobrar a las entidades financieras por los depósitos un 0,1%. Todo ello para intentar que fluyeran los préstamos por parte de los bancos a las empresas. Pero eso no es lo que esperaban los inversores como se ha visto reflejado en los flujos de fondos de esta semana, según el informe que publica EPFR.
Los inversores precisamente adoptaron la posición de que las medidas previstas por el BCE serían malas para euro y para reducir la inflación. Los flujos de fondos muestran que en general fueron positivos para la renta variable europea y espectacular para la deuda de los mercados emergentes.
La semana que terminó el 4 de junio vio como los fondos europeos de renta fija de protección contra la inflación registraron su mayor salida, mientras que los fondos de renta variable de Japón, China, Corea, Suiza y el Reino Unido experimentaron reembolsos netos.
En general, los fondos de bonos en conjunto recibieron entradas de dinero de 4.250 millones de dólares. Esa cifra fue su decimotercera entrada semanal consecutiva y elevó elevando el flujo hasta los 85.000 millones de dólares. Asimismo, los fondos generales de renta variable registraron un flujo de salida de 2.000 millones de dólares.
Fondos de bonos emergentes, de récord
El Global Emerging Markets Equity Funds registró salidas por segunda vez en las últimas 10 semanas. De los cuatro grupos principales de de los mercados emergentes sólo los fondos de renta variable de América Latina.
Sin embargo, lo destacable han sido los 2.100 millones de dólares de entradas de los fondos de renta fija de mercados emergentes.