La situación de la banca se mantiene complicada: “los bancos son un sector que como inversión ofrecen poco en términos de creación de valor para el accionista y, por lo tanto, ofrecen mucho riesgo”. Uno de los motivos es la insuficiente recompensa que puede proporcionar ahora mismo un inversor estable con vistas a medio-largo plazo. “Cuando un sector tiene estos condicionantes, la recomendación es la de estar fuera”.

En cuanto a la inversión de ahorros en renta variable española, la situación es incierta a corto plazo aunque, según el analista, hay oportunidades. “La bolsa española, a pesar de todo ese maremagnum que se está generando en torno a ella, tiene algunas opciones interesantes de inversión”. A día de hoy, la mejor opción es esperar hasta que se recupere la sensación de tranquilidad porque “los condicionantes son muy fuertes como para pensar que la situación es propicia para invertir”.