Ni una sola bolsa en Europa se ha salvado de la quema. La decisión de Alexys Tsipras de convocar un referéndum para que la población griega decide si está dispuesta a aceptar las medidas que pide la Troika ha cerrado, de momento, las negociaciones con los acreedores. Los mercados han entendido que en la actualidad el partido ya no se juega para salvar un default que se producirá si el país no paga al FMI mañana mismo; lo que se está poniendo en entredicho es la pertenencia a Europa.

El miedo a un contagio entre los países de la periferia, entre los que se encuentran Italia y España ha desatado los nervios entre los inversores de todo el mundo que ya comienzan, incluso, a cuestionarse la viabilidad de la unión europea.

Pero cuando nos alejamos de las posiciones más catastróficas vemos que la mayor parte de los expertos sigue creyendo en la posibilidad de que mañana mismo se produzca un acercamiento entre las partes. Y, si no se produce, la mayor parte de los analistas y de los miembros de la Unión Europea creen que al final los países señalados con el dedo no sufrirán un contagio. Lo decía esta mañana el ministro de economía español, Luis de Guindos, la economía y los bancos de nuestro país están en buena forma y esto sólo será un traspiés.

De hecho, muchos analistas creen que la volatilidad y la incertidumbre será de corta duración y que las instituciones europeas capitaneadas por el BCE lograrán formar un cortafuegos que evitará cualquier problema.
Habrá que esperar.

Por el momento, como dice Carpatos en su sección de Estrategias de inversión, "la deuda periférica ha empeorado pero no de forma grave, y sobre todo quien más se suponía que podía pagar los platos rotos, el euro, no solo no ha bajado sino que ha subido.

En este contexto hay que situar la bajada de las bolsas, como la pérdida de un plumazo de todo lo que se perdió la semana pasada por descontar el acuerdo en plan cuento de la lechera".

Para este experto, las consecuencias en la sesión de hoy no han sido mayores porque "los operadores creen que el BCE va a tomar muy fuertes medidas para que las cosas no lleguen a mayores, y porque por otro lado el mercado no espera con claridad que esto vaya a peor, más bien están descontando que va a salir SI en el referéndum, y aún habrá acuerdo. 
En cualquier caso no aconsejamos entrar en este berenjenal ni largo ni corto, los cortos pueden ser peligrosos, y los largos también, mejor ver los toros desde la barrera."


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