Esta progresión contrasta con la sostenida caída de los precios de venta de los inmuebles, que se amplió hasta el 8,3% en la vivienda libre durante el segundo trimestre, según el Ministerio de Vivienda.

Esta dispar evolución no supone un incentivo en línea con la apuesta del Gobierno, que aboga por un mercado más equilibrado que el actual, con mayor peso del mercado del alquiler en detrimento de la compraventa.

En términos acumulados, los alquileres se encarecieron un 1,5% desde el mes de enero, frente a la caída del 0,5% del índice general. La menor diferencia se observa en la tasa intermensual, con una caída del 0,9% de indicador principal, sólo un punto porcentual por debajo del incremento del 0,1% experimentado por los precios de los alquileres respecto a junio.

Por comunidades, el precio de los alquileres experimentó las mayores subidas en Cantabria (+4,8%), Ceuta (+4%), Aragón (+3,7%), Andalucía (+3,4%), Asturias (+3,4%), Cataluña (+3,4%), Comunidad Valenciana (+3,4%), Baleares (+3,1%) y Galicia (+3%).

Por debajo del promedio nacional (+3%) se situaron La Rioja (+2,9%), País Vasco (+2,8%), Comunidad de Madrid (+2,6%), Melilla (+2,6%), Castilla y León (+2,4%), Canarias (+2,1%), Castilla-La Mancha (+1,9%), Extremadura (+1,8%), Murcia (+1,6%) y Navarra (+0,7%).

Por otra parte, los precios de conservación de la vivienda se incrementaron un 2,8% en el último año, dos décimas por debajo de los alquileres. Además, esta rúbrica subió una décima en el mes de abril.