El último dato, el de bienes duraderos ha resultado un poco peor de los esperado. Si los inventarios de la vivienda, de empresa o de autos se reducen, cabría esperar un aumento de las inversiones que de alguna forma compensaran los riesgos inflacionistas de la FED.Sin embargo parece que la inversión empresarial se está manteniendo, aunque existen ciertas dudas sobre qué expectativas manejan las empresas.La evaluación de la situación actual, así como la venta de viviendas ha mejorado, lo que ha permitido en cierto modo atenuar las caídas.Tras las declaraciones de Greespan, no hay que augurar una crisis o una recesión económica. El mercado está débil y es posible que entre en recesión pero no es más que una posibilidad.En términos generales vemos la economía más débil a causa del crecimiento de las importaciones, una caída de los inventarios mayores de lo esperado, junto con un ajuste en la vivienda pero no son datos catastróficos.