- El debate entre value y growth también se da durante la crisis del coronavirus. ¿Por cuál de los dos estilos os decantáis? ¿Por qué?

En Columbia Threadneedle somos una casa con un cierto sesgo hacia el quality growth. Ese es nuestro know how, detectar compañías que en el largo plazo lo van a hacer mejor. Consideramos que ese tipo de compañías son las llamadas quality growth. Son compañías con una ventaja diferencial  en el producto o el servicio, que las hace más fuerte. Eso no quiere decir que en todos los escenarios las compañías growth lo vayan a hacer mejor, porque hay momentos, como las últimas semanas donde puntualmente las peores compañías, o las compañías más value, llegan a puntos tan bajos donde el mercado hace que reboten. En general, en entornos complicados como los que previsiblemente vamos a vivir en estos dos años, es más factible que aquellas compañías que tengan una ventaja competitiva, que tengan un posicionamiento más fuerte, tengan mejores resultados.

Creemos, por lo tanto, que en un entorno como el que vamos a tener, es más interesante dedicarnos a seleccionar ese tipo de compañías más que a buscar una si una compañía está barata o no. Normalmente, cuando algo está barato, lo está por algún motivo. Preferimos elegir compañías fuertes, que van a  seguir teniendo beneficios porque tienen un producto o un servicio diferencial que les hace, incluso en entornos más complicados, tener buenas rentabilidades. Y ese tipo de compañías son en las que nos fijamos y que llamamos quality growth.

- En un entorno como el actual, ¿qué beneficios conlleva invertir siguiendo un estilo growth?

En un entorno como el actual, donde hay mucha incertidumbre, la ventaja, siempre que seamos inversores de medio y largo plazo, es que sabemos que estamos invirtiendo en algo de calidad. Podemos tener momentos de volatilidad, donde en una o dos semanas el value lo haga mejor que el growth. Pero en el medio y largo plazo, en un entorno complicado donde lo que vamos a ver va a ser default de muchas compañías, tenemos cierta de que son compañías que van a sobrevivir a la crisis y que, por lo tanto, van a tener mejores resultados que aquellas que son más débiles. Creemos que buscar compañías buenas que pensemos que lo van a hacer bien es un juego más interesante que intentar buscar entre las que van a tener más problemas aquellas que se vayan a salvar.

- Entonces, ¿consideran que las diferencias de rentabilidad entre los estilos value y growth seguirán ampliándose en el futuro?

En los últimos años las compañías growth lo han hecho mucho mejor que el value. Entonces había una cierta opinión en el mercado de que ya que el value ha tenido una peor evolución, estadísticamente le tocaría hacerlo mejor. Esto lo definimos en el mundo anglosajón como los value traps, las trampas del value. El que algo esté barato o muy barato no quiere decir que tenga mayor probabilidad de subir. Muchas veces la justificación de un precio muy barato es porque es un modelo de negocio antiguo o porque son compañías muy reguladas por los gobiernos. Ese tipo de compañías son baratas pero lo son por algún motivo. Se debe tener muchísimo cuidado con dejarse llevar con las estadísticas. Es una opinión bastante arriesgada porque si ya de por sí en entornos más alcistas como los que hemos vivido en los años anteriores el value no ha funcionado, entendemos que en un escenario más complicado, donde los PIBs van a bajar y va a haber mayor desempleo, es altamente arriesgado intentar buscar en ese tipo de compañías que por fundamentales son peores,  aquellas que lo vayan a hacer mejor. Es un juego arriesgado y nuestra especialidad es buscar las mejores compañías.

- ¿Dónde ven las mejores oportunidades en growth? ¿Cómo las aprovechan en Columbia Threadneedle?

En estos momentos, lo que estamos recomendando es invertir a nivel global. No quedarnos solamente en un mercado, en el Ibex 35 o Europa. Creemos que hay que abrir un poco el horizonte de miras y buscar compañías a nivel global. Buscar las mejores compañías en un entorno que va a ser complicado. Todo eso lo plasmamos en un fondo muy reconocido en nuestra casa y a nivel mundial, el Global Focus, que es un fondo de renta variable internacional que integra las 40 mejores ideas de nuestros gestores. Es decir, cuáles son las 40 mejores compañías a nivel mundial, en distinto países y sectores, que tienen ventajas competitivas diferenciales y que van a hacer frente a estos dos años de crisis.

Este tipo de compañías las encontramos en EEUU, en Asia, en países latinoamericanos o en Europa, y en distintos sectores. Tienen un denominador común que es que son compañías de calidad, entiendo por compañías aquellas que tienen un factor diferencial. Normalmente suelen ser líderes de su sector o si pertenecen a un sector tipo oligopolio donde hay pocos jugadores suelen ser uno de los dos o tres primeros. Podemos buscar ejemplos en tecnología. Es uno de los sectores que a nivel mundial vemos con mayor proyección. Son compañías que tienen una posición de liderazgo como Microsoft o Amazon. Compañías que a pesar de la crisis van a seguir teniendo un buen comportamiento.