Parece ser que el gran volumen de emisiones de nuevos bonos corporativos investment grade (de alta calidad) que ha habido en los últimos meses va a continuar, ya que las empresas se están aprovechando del descongelamiento en el mercado crediticio para refinanciar su deuda y adquirir más capital, asegura Stefan Isaacs, gestor de M&G European Corporate bond fund.


El primer trimestre de 2009 rompió el record de emisiones de deuda en euros de compañías no financieras, alcanzando la cifra de €112.600 millones, mucho más que los €30.000 millones del mismo periodo del año pasado.


Ahora es mucho más difícil obtener préstamos de los bancos, ya que estos aún se encuentran en situación angustiosa. Pienso que tardaremos un tiempo en recuperar un entorno de préstamos ‘normalizado’”, afirma Isaacs.

“Los compradores como nosotros se encuentran en una posición ventajosa porque, con las limitadas opciones que existen para financiarse, las empresas quieren asegurarse que estas nuevas emisiones se suscribirán por completo. Ya que no pueden permitirse el lujo de tener una recepción poco entusiasta, han estado ofreciendo a los inversores condiciones particularmente atractivas en relación con bonos similares que ya se han emitido. Esto nos da la oportunidad de comprar nuevas emisiones de calidad con condiciones muy favorables”.

“Por lo tanto he estado comprando nuevas emisiones de forma selectiva. Mi estrategia de inversión no cambiará, así que estoy evitando el sector financiero y estoy encontrando las mayores oportunidades de inversión en emisiones con rating A y BBB en sectores industriales no-cíclicos, empresas que deberían ser más capaces de sobrevivir el declive económico, por ejemplo el sector de las empresas de servicios públicos (utilities) y de telecomunicaciones"