¿Cómo definirían la situación económica que deja el coronavirus y cómo ven la recuperación?

La recesión global es inevitable, la pregunta es cuál va a ser la recuperación de esa recesión. Tenemos tres escenarios. El más optimista es el tipo recuperación en “V” vemos una fuerte caída de la demanda en el segundo trimestre y empezamos a ver la salida del túnel en el tercer y cuarto trimestre, en los que se empieza a normalizar el crecimiento global. El segundo escenario es de tipo “U”, en el que cuesta más salir del impacto del coronavirus, deja su lastre en el tercer y cuarto trimestre y comenzamos a ver recuperación en el primer trimestre de 2021. El escenario más pesimista es el de “L”, en el que se produce una caída fuerte de demanda y crecimiento y la recuperación cuesta más tiempo. Una “L” que sería equivalente a una depresión global. No es muy posible.

Lo más probable desde nuestro punto de vista es una recuperación en “V”, una recuperación en la segunda parte del año. Es difícil saber exactamente cuál va a ser el impacto del coronavirus en el tiempo. Estamos en nuevas circunstancias, no tenemos contexto histórico y hay mucha incertidumbre sobre este tema. Vamos a fijarnos en Italia, para ver cómo sale y normaliza su economía, al ser el primer país que entró en todo esto.

¿Y a nivel de mercados? 

Todos los activos financieros han corregido con algunas excepciones: el dólar, los bonos refugio del tesoro americano y el oro, que son los típicos activos de refugio. Hemos visto pérdidas en los activos financieros, en todo lo que son activos de riesgo. Creemos que hay oportunidades. Este tipo de movimientos en los mercados financieros siempre dejan oportunidades para los inversores, pero a corto plazo recomendamos cierta cautela. Vamos a seguir viendo una volatilidad alta en los mercados.

¿Qué estrategia van a seguir en sus fondos en este contexto?

Mantenemos las carteras con un poco de más de efectivo que el habitual porque puede haber rescates en algunos activos de riesgo. Los inversores menos experimentados que no están tan acostumbrados a estos eventos extremos pueden rescatar, por lo que siempre es bueno tener un poco más de liquidez. Los inversores institucionales típicamente aprovechan este tipo de situaciones para añadir riesgo, porque ven valoraciones más descontadas y son inversores a largo plazo. Hemos notado entradas por parte de inversores institucionales, y de individuales algo más de reembolsos. La ventaja de tener algo más de efectivo es poder aprovechar las oportunidades. Si hay valoraciones atractivas puedes actuar. Si no, tienes menos flexibilidad para actuar en momentos de gangas en los mercados. Estamos manteniendo la calidad de las carteras. Mantener acciones que están con menos apalancamiento, con balances sólidos y con pocas presiones en la parte de efectivo, en sectores que salen menos perjudicados del impacto del Covid-19, como el tecnológicos o el farmacéutico. Esas son las dos principales cosas que estamos haciendo en las carteras ahora: mantener calidad y aumentar algo el efectivo.

¿Les parece acertado la reacción de los bancos centrales y gobiernos? (¿Esperan algo más de la UE?)

Los bancos centrales han sido muy contundentes. Vimos algo de pánico cuando hasta el tesoro americano se vendía, que es un activo refugio, hace dos semanas. La Fed dijo en aquel momento que haría todo lo necesario, algo parecido a lo que dijo Draghi en su día. En su plan de compra y de inyecciones de liquidez incluye por primera vez en su historia bonos corporativos. Hay una especie de actividad frenética por parte de la FED. El BCE también dijo que iba a utilizar hasta 750.000 millones de euros para inyectar liquidez, que incluyen también la compra de bonos corporativos. También hemos visto bajadas de tipos en EEUU, mientras los gobiernos han anunciado planes fiscales muy agresivos para ayudar a pymes y grandes empresas.

¿Qué activos sobreponderan en este contexto y cuáles infraponderan?

Preferimos acciones o empresas que tengan niveles muy bajos de endeudamiento, que son capaces en este entorno incluso de ir generando efectivo y que son un tipo de acciones que llamamos de crecimiento pero de calidad. Esa es la preferencia dentro de la renta variable. Hay que tener cuidado con los dividendos porque hay sectores que los están reduciendo de forma agresiva, lo hemos visto sobre todo en el financiero. Esto no significa que no haya oportunidades en la parte del dividendo pero hay que tener mucho cuidado. Debido a la crisis que encaran las empresas y a la presión de los reguladores, algunas entidades financiera están reduciendo su dividendo. Sectores como el turismo o los hoteles también se están viendo obligados a reducirlos.

Si hablamos de la renta fija, la parte del mercado que más nos gusta es la de bonos corporativos de grado de inversión. Los bancos centrales están apoyando esta parte del mercado tanto en EEUU como en Europa. Ofrece unos diferenciales muy interesantes. Si con tipos normales hemos visto diferenciales con el de los gobiernos de 50 o 100 puntos básicos, en estos momentos tienes 250 o 300 puntos básicos de diferencial entre lo que ofrece el típico bono corporativo de calidad y los bonos del gobierno de los diferentes países. Eso nos parece una forma de invertir relativamente conservadora que nos ofrece unas rentabilidades interesantes.

Tenemos más cuidado en deuda emergente en divisa local. Las dividas locales en los países emergentes están bajo presión. Cuando hay mucho estrés en el mercado financiero las empresas y los individuos piden más dolares y eso pesa sobre las divisas locales de los países emergentes. Dentro del high yield preferimos duraciones más cortas donde hay más visibilidad. En un momento en el que muchos ratios financieros pueden estar distorsionados (porque los beneficios pueden ser peor de los estimados)...

¿En qué se fijan sus analistas y gestores?

Los analistas de renta variable se fijan sobre todo en cómo el modelo de negocio de la empresa en concreto se adapta a este nuevo mundo impactado por el coronavirus y también cuál es su nivel de endeudamiento.

En renta fija, nos fijamos sobre todo en el efectivo que genera la emisión, en si es suficiente para cubrir los cupones y cuáles son los sectores más vulnerables al impacto del coronavirus. Hemos visto mucho impacto en compañías de petróleo y gas. Además del impacto del coronavirus se ha producido una fuerte caída de los precios del petróleo. Eso, en el caso de algunas emisiones dentro del sector ha tenido un impacto muy significativo. Esta parte del mercado está bajo un desafío muy importante de supervivencia, sobre todo en el high yield.