Algunos fondos vieron rentabilidades de doble dígito durante este primer trimestre del año, pero hay uno en especia que destaca, rozando casi el 95% al cierre de marzo según datos de Morningstar.

Este fondo es el Alcalá Multigestión Oricalco que, si ya en 2020 era el fondo revelación, en este primer trimestre los resultados lo catapultan hasta el infinito y más allá. En 2020 terminó con una rentabilidad del 156,96%, habiendo caído tan solo el9% en el 1T20, recuperando en el 2T con rentabilidad del 14,33%, del 5,91% en el 3T y ya remató el 4T con una rentabilidad del 133,2%. Y es este fondo que comienza el año alcanzando una rentabilidad del 94,65% en el 1T21.

Pero parece que el gestor se quedó con ganas de más y vemos una certera donde entre las principales posiciones vemos varias empresas relacionadas con las criptoactivos como Argo Blockchain (empresa que como su nombre lo indica, de tecnología blockchain y se centra en la minería de criptomonedas a gran escala) con un peso cercano al 14%, Galaxy Digital (que opera en mercados digitales, criptomonedas y tecnología blockchain) con un peso de 8,4%, HIVE Blockchain Technologies, con un peso de 6,5%, Bitfarms 5%, y Voyager Digital (plataforma de criptoactivos), y Hut 8 Minung Corp (operador de critomonedas en Canadá); también vemos alguna SPAC (special purpuse acquisition companies) como TPG Pace Tech Opportunities con un 2,4%; una call sobre Micro Strategy (empresa de inteligencia de negocios e informes empresariales); y tecnológicas como Tencent Holdings y Taiwan Semiconductors.

Es un fondo mixto global, que puede ir de 0% a 100% en renta fija o renta variable, más flexible imposible. Tiene un patrimonio que, a diferencia de sus rentabilidades, es pequeño y sobrepasa escasamente los 10 millones de euros. Es asesorado por Diego Bernabéu.

La cartera tiene un claro sesgo a empresas pequeñas small y micro caps, que representan algo más del 70%. Durante el trimestre mantuvo un 66% de peso en Norteamérica, 16% en Reino Unido y 13% en Asia emergente, entre otros. En cuanto a la exposición sectorial destaca el fuerte peso en servicios financieros (55%), seguido por tecnología 21%, enfocada a megatendencias.

El fondo no cuenta con rating de Morningstar, sin embargo, destaca entre los fondos con mejor ranking en Citywire a 1 año, posicionado en el primer lugar de 404 fondos comparables (mixtos flexibles EUR), aunque por desviación estándar se posiciona en la cola, con una volatilidad muy superior a la media de sus competidores y un binomio rentabilidad/riesgo no tan atractivo:

Otros fondos con rentabilidades superiores al 30%

Entre estos fondos hay tres fondos con patrimonio verdaderamente pequeños, como Esfera III Global Gradient, con 3,7 millones de euros y que alcanza una rentabilidad al 1T21 de 35,10%. Le sigue otro fondo de Andbank también, como el Esfera I Value y cuyo patrimonio es de 2,7 millones de euros y alcanza una rentabilidad del 34,95%; y por último otro de casi 4 millones de euros, el fondo Altarius PrimeValue, con una rentabilidad del 31%.

Enfocándonos en aquellos de mayor patrimonio, empezando con Odey Swan I, con 150 millones de euros de patrimonio y una rentabilidad trimestral del 30,77%. El fondo es un alternativo multiestrategia (en realidad un long/short de renta variable), gestionado por Crispin Odey, con una historia de más de 5 años, pero que ni a 1, 3 o 5 años logra posicionarse en primer cuartil, ya que sólo en 2014 y 2018 el fondo terminó con rentabilidad positiva, mientras que el resto de los años ha sido negativa y de doble dígito. El fondo no ofrece un binomio rentabilidad/riesgo atractivo:

Otro fondo que destacar, tanto en el corto como largo plazo es el Schroder ISF Global Energy, con un patrimonio de los mayores hasta ahora 323 millones de dólares, y que en su larga historia le pasa algo como al anterior, es decir, años con rentabilidades negativas de doble dígito y que sólo en 2016 superó el 40% de rentabilidad positiva y en 2019 prácticamente estuvo plano y ahora en el primer trimestre alcanza el 31,25%.  Morningstar le otorga una estrella, pero con rating negativo. La cartera está integrada por posiciones como Repsol (5,9%), Schlumberger (5,5%), BP (4,9%), Devon, Cimarex, entre otras. Sus 10 mayores posiciones representan el 44,4% de los activos, con una fuerte concentración en EE.UU. y Canadá, de más del 65%, pero donde España representa casi el 6%.

Se trata de un fondo con una alta volatilidad y por tanto un binomio rentabilidad/riesgo para un perfil de cliente más arriesgado. A un año el fondo se posiciona según Citywire en la segunda posición por rentabilidad de 12 fondos comparables, aunque por máxima caída no compara bien, ni a 1, 3 o 5 años. El gestor del fondo es Mark Lacey, que por cierto también tiene la batuta del fondo Schroder ISF Global Energy Transition, fondo lanzado a mediados de 2019 y del cual Inés del Molino, directora de cuentas, habló en el webinario de Estrategias de Inversión La importancia del Desarrollo Sostenible en el mundo de inversión”, con un patrimonio de los mayores hasta ahora, 1.179 millones de dólares, y que a un año alcanza una rentabilidad de casi 70%.

Y por último, el fondo Quadriga Investors Global Allocation, con 27,2 millones de euros y que alcanza una rentabilidad trimestral de 33,3% gestionado por Frances Marin Jeremias, es otro long/short de renta variable. El fondo se posiciona por rentabilidad en el lugar 2 de 233 fondos similares según Citywire a un año, aunque por máxima caída se va a cuarto cuartil. A tres y cinco años se mantiene en primer cuartil por rentabilidad, con una volatilidad alta. A diferencia del fondo Odey Swan I, este fondo alcanza rentabilidades positivas en 4 de 7 años, y en los años con pérdidas éstas son menos abultadas que el de Odey.