La cotización del índice S&P 500  muestra los primeros síntomas de agotamiento alcista tras el rally comprador iniciado a partir de los mínimos de octubre 2023, movimiento en el que el índice bajo estudio logró revalorizarse un +16,8% desde el punto mínimo al punto máximo.

Sin embargo, la verticalidad de dicho impulso alcista no es gratuita, pasando factura a las abultadas lecturas de sobrecompra acumulada en el oscilador de momento MACD diario y, cuyas lecturas comienza a activar cortes descendentes en un contexto (1) de elevada complacencia –volatilidad en mínimos- y (2) el precio perforando el último mínimo creciente terciario o de corto plazo que proyectamos a partir de los 4.694 puntos.

S&P 500 (SP500) en escala diaria con volatilidad (ventana central superior), MACD (ventana central inferior) y volumen de contratación (ventana inferior). Fuente: ProRealTime y elaboración propia.

Gráfico diario del S&P 500

De este modo, podemos plantear nuevas posiciones cortas o de venta a precios actuales tras la perforación del soporte de corto plazo citado, estableciendo un stop loss a cierre diario por encima de los actuales máximos proyectados a partir de los 4.973 puntos, y con objetivo a la altura de los 4.450 / 4.400 puntos, área que es aproximación al retroceso proporcional de Fibonacci del 50% / 61,8%, así como a la zona de anteriores techos o resistencias, ahora convertidas en potenciales zonas de suelo o soporte.

En base al comentario técnico anterior, la estrategia se puede desarrollar con el Warrants PUT con strike 4.700 puntos y vencimiento 15 de marzo 2024