El fabricante alemán de ropa y accesorios deportivos Puma cerró el primer trimestre de 2022 con un beneficio neto de 121,4 millones de euros, lo que supone un incremento del 11,2% en comparación con el mismo periodo del año pasado, según ha informado este miércoles la compañía.

De esta forma, el beneficio por acción de Puma avanzó un 11,1%, hasta situarse en 0,81 euros, frente a los 0,73 euros contabilizados entre enero y marzo de 2021.

El consejero delegado de la firma, Bjorn Gulden, ha destacado que la empresa ha tenido un "muy buen inicio" del año, con una demanda elevada tanto por parte de los comercios como de los consumidores.

"El brote de Covid-19 en China, la crisis en Ucrania, la situación muy tensa del transporte de mercancías y las presiones inflacionistas son incertidumbres que nos fuerzan a permanecer muy flexibles y gestionar nuestra empresa tan bien como sea posible a corto plazo sin afectar al impulso a medio plazo de Puma", ha explicado el primer ejecutivo de la compañía.

En el conjunto del trimestre, la facturación se elevó un 23,5%, hasta 1.912,2 millones de euros. Por segmentos de negocio, las ventas de calzado crecieron un 21,6%, hasta 941,3 millones, mientras que las de ropa se situaron en 638,7 millones, un 20,1% más. Los ingresos procedentes de la venta de accesorios fueron de 332,2 millones, un 36,7% más.

Los costes asociados a las ventas en el trimestre crecieron un 26,6%, hasta 1.010 millones de euros, mientras que el resto de gastos operativos se situó en 712,8 millones, un 18,6% más.

De esta forma, el resultado neto de explotación (Ebit) de Puma hasta marzo experimentó un crecimiento interanual del 27%, hasta 196 millones de euros.