La tecnológica española Arquimea ha invertido 15 millones de dólares (algo más de 14,3 millones de euros al cambio) en el capital de la compañía especial israelí NLSComm.

Se trata de una compañía de tecnología espacial que ha desarrollado una antena desplegable basada en polímeros de memoria de forma, que

ofrece muchas ventajas para su uso en enlaces de comunicación entre satélites, según un comunicado.

La principal aplicación de esta tecnología es su uso en las constelaciones de satélites, un extremo que ambas compañías desarrollarán utilizando los fondos aportados por la firma española para desarrollar de una innovadora constelación de telecomunicaciones

basada en esta tecnología, denominada BeetleSat.

La tecnológica registró el pasado diciembre en el MARF un programa de bonos de 100 millones de euros y otro de pagarés de 75 millones de euros para expandirse internacionalmente.

La constelación contará con 250 satélites de comunicación cuyo despliegue está previsto para 2025 y proporcionará conectividad global para aplicaciones que requieran gran ancho de banda y baja latencia.

Con la antena de la firma israelí, se puede obtener un ancho de banda de hasta un 1 Tbps en toda la constelación.

Las partes han conducido el pasado mes de abril un experimento en la Estación Espacial Internacional y dedicarán los dos próximos años a actividades de desarrollo, industrialización y reducción de riesgos técnicos. En este periodo también fabricarán los dos primeros satélites con la idea de lanzar uno el próximo octubre.