A un mes y poco más de una semana para que termine el año, parece que las criptomonedas se lo toman con calma en el mercado, en esta semana en la que se ha roto, además, con rebote, la senda bajista que estaba marcando Ethereum en el último mes.
Los 4.000 dólares parecen ser un antes y un después, un punto de inflexión para el valor mientras persisten esos vaticinios de Goldman Sachs que a principios de apostaba por un ether doblando casi su actual valor a finales del presente ejercicio. Ya sabéis además que en mayo pasado el banco de inversión ya consideraba a Ethereum como el Amazon de la información que iba a desbancar, y todavía lo cree, a Bitcoin.
De momento si miramos da las expectativas, nos encontramos con un Ethereum que es visto, desde AMB Cryto nada menos que en los 11.000 dólares por activo en 2022. Para ello, desde sus niveles actuales debería recuperar nada menos que un 167%. Pero en el universo crypto todo es posible, porque desde el último año Ethereum gana nada menos que un 588%.
De hecho, en su gráfica de cotización comprobamos como el valor cae un 2,90% en las últimas cinco sesiones, un 3% es su descenso mensual, pero se ve compensado con el repunte trimestral del 28,5% y el semestral, roza el 100%. En lo que va de año gana un 459,5% y desde noviembre del pasado año remonta un espectacular 588%. Desde sus máximos recorta ya por encima del 13% con una capitalización actual que supera los 486.000 millones de dólares.
De momento parece que hay que mirar a cotas menos altas. Por ejemplo, desde Cryptopolitan destacan que, a pesar de las caídas de las últimas sesiones, Ethereum se está estabilizando, aunque la volatilidad del mercado crypto se ha elevado.Consideran que su primera resistencia estriba en los 4.460 dólares y como soporte actúan los 4.075 dólares.
Si atendemos a lo que nos aportan los indicadores técnicos de Estrategias de Inversión vemos que alcanzan, en modo alcista y con una mejora de medio punto porcentual, una gran nota, que alcanza en puntuación total los 9 puntos de los 10 posibles para la criptomoneda.
En la parte negativa solo destaca el volumen de negocio a medio plazo de Ethereum que marca decreciente. Ya en el otro lado la tendencia es alcista en sus dos vertientes, tanto a medio como a largo plazo. El momento total, lento y también rápido, es positivo. De igual forma, el volumen de negocio a largo plazo se muestra creciente para el activo y la volatilidad, a medio y también a largo plazo, es decreciente.
A pesar del tránsito actual de Ethereum del que ya hemos hablado, en esa actualización de PoW el modelo de prueba de trabajo actual hacia el PoS, el de prueba de participación, comprobamos además que ya se han “quemado” más de 947.000 Ethers desde la bifurcación de Londres, de forma que se limita su circulación. Además, desde Oanda destacan que se ha reducido ya el ritmo con el que se acuñan los tokens, por lo que Ethereum será más escasa en el mercado e impulsará al alza el activo.
Mientras el tema de las comisiones en sus transacciones se cobra una primera gran víctima. El director ejecutivo del fondo de Singapur Three Arrows Capital Su Zhu dice que abandona Ethereum por esa razón y considera que ha abandonado a sus usuarios. Esa, como saben es una queja generalizada entre los usuarios, para una comisión media que ha crecido en más de tres veces en el último trimestre, con máximos que rozaron los 63 dólares el pasado 9 de noviembre.
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