Amazon.com ha informado de que su Unidad Contra los Delitos de Falsificación (CCU, por sus siglas en inglés) ha trabajado junto a

Salvatore Ferragamo para facilitar información sobre presuntos falsificadores de su icónico cinturón Gancini a las autoridades de la Administración Estatal de Regulación del Mercado de la ciudad de Yiwu, en la provincia de Zhejiang, en China, según ha indicado en un comunicado.

En concreto y tras una investigación de la Administración Estatal

de Regulación del Mercado en colaboración con la CCU, funcionarios chinos registraron el almacén de los infractores, donde requisaron cientos de cinturones falsificados que, de otra manera, podrían haber sido vendidos en todo el mundo, a través de distintos canales minoristas.

Amazon y Ferragamo seguirán apoyando a las autoridades en sus investigaciones sobre productos falsificados para prevenir que estos productos entren en la cadena de suministro global y deteniendo la comercialización ilícita de productos falsificados en su origen.

Este caso tiene su origen en una investigación mundial contra falsificadores, identificados por ambas compañías, cuando trataban de vender sus productos en Amazon.

En febrero de 2021, ambas firmas presentaron dos demandas conjuntas ante el Tribunal del Distrito Occidental de Washington (Estados Unidos), alegando que los acusados conspiraron para utilizar las marcas registradas de Ferragamo, sin autorización y para engañar a los consumidores sobre la autenticidad, origen y la vinculación de los productos con la marca italiana.

A lo largo de los años, Salvatore Ferragamo ha implementado una serie de acciones contra las falsificaciones, tanto 'offline' como 'online', con la finalidad de proteger a los consumidores y a su marca.

Gracias a dichas acciones, en 2021, más de 22.000 productos infractores y piezas de contenido ilícito fueron eliminados de las plataformas de redes sociales y más de 130.000 listados relacionados con productos falsificados, fueron identificados y retirados de sitios de comercio electrónico.

Por su parte, Amazon ha recordado que prohíbe, de "manera estricta", la venta de productos falsificados en sus tiendas. En 2020, el 'marketplace' invirtió más de 700 millones de dólares y empleó a más de 10.000 personas para proteger proactivamente sus tiendas del fraude, la falsificación y el abuso