El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha afirmado que lo ocurrido este jueves en el Congreso de los Diputados con la votación para convalidar la reforma laboral fue un "espectáculo inaceptable", con diputados "tránsfugas" y un "intento de Tamayazo" orquestado por el PP.

"No había justificación para que el PP no votara esta reforma. Dijo que era maquillaje, pues para ser un maquillaje fueron a buscar a dos diputados para intentar variar el resultado", ha señalado Álvarez en relación a los dos diputados de UPN que votaron en contra de convalidar la reforma, rompiendo la disciplina de partido.

Álvarez, que ha dicho sentir una "profunda tristeza y cierta vergüenza" por lo sucedido ayer en el Congreso, se ha alegrado, no obstante, de cómo acabó todo: un voto erróneo del PP permitió convalidar la reforma en un acto que el dirigente sindical ha calificado como "justicia divina". "Como diría mi madre, Dios castiga sin piedra ni palo", ha apuntado.

Durante una asamblea en Ponferrada para explicar el contenido de la reforma laboral, el líder de UGT ha pedido al PP que "reflexione" sobre si esta es la España a la que quiere que ir y "si este bananerismo le va a servir de tobogán para llegar a La Moncloa". "Lo que los españoles quieren es que la oposición actúe con lealtad", ha subrayado.

También ha enviado un mensaje a los partidos de izquierda que ayer votaron en contra de convalidar la reforma laboral, asegurando que su negativa a apoyar esta ley implica decir que sí a la reforma laboral del PP del año 2012.

"A falta de otros argumentos mejores, los partidos de izquierda que votaron en contra utilizaron el argumento de que no se tocaba el despido. Lo que hicieron con su voto en contra fue votar sí a la reforma del PP de 2012", les ha reprochado.

En este sentido y en relación al despido, el líder de UGT ha explicado que lo que se ha pactado en la reforma laboral es lo que tiene que ver con las materias comprometidas con Bruselas, lo que no significa que los sindicatos hayan renunciado a modificar el despido.

"Lejos de renunciar a cambiar lo que no hemos negociado, tenemos la perspectiva de que se vuelvan a abrir negociaciones para hablar del despido, sus causas, su tramitación y su coste", ha remarcado.

Álvarez ha destacado algunas de las medidas más relevantes del mercado laboral, entre ellas las relacionadas con la negociación colectiva, de las que ha dicho que sí suponen una "derogación" de la reforma de 2012.

También ha hecho hincapié en el "cambio revolucionario" que se ha realizado en la reforma para que el contrato indefinido sea el ordinario y se reduzca así la elevada temporalidad del mercado laboral español. De hecho, según sus cálculos, la reforma laboral permitirá recortar la tasa de temporalidad en unos diez puntos de aquí a un año, pasando del 25% actual al 15% ó 18%.