MADRID, 06 AGO. (Bolsamania.com/BMS) .- La profunda crisis política entre Rusia y Estados Unidos/Europa por Ucrania significa, en opinión de los analistas de Capital Economics, “que las incertidumbres asociadas a las previsiones económicas son mayores de lo normal. En estas circunstancias tiene mucho más sentido si cabe pensar sobre cómo se desarrollarán los acontecimientos y qué consecuencias tendrán para la economía rusa y los mercados financieros”.

En este sentido, y ante las informaciones llegadas desde Polonia que apuntan a que Moscú estaría aumentando su presencia en la frontera con Ucrania, estos expertos han concluido que la situación podría derivar en tres posibles escenarios:

REDUCCIÓN DE LAS TENSIONES

Es la visión más optimista y se basa en que el Kremlin tome ciertas medidas “algo concretas” para que la situación mejore. Una forma de hacerlo, por ejemplo, “seria comprometerse a detener el flujo de combatientes voluntarios y de armas a la frontera, tal vez bajo la supervisión de observadores internacionales”.

En el corto plazo, podría significar que se levanten la sanciones “relativamente rápido”, lo que causaría un rally en el rublo y en la bolsa rusa. “Con el tiempo, que la moneda se estabilizara podría causar inflación, lo que facilitaría que el banco central bajará los tipos”. No obstante, estos expertos consideran que es poco probable que se produzcan importantes caídas en los precios debido a los problemas estructurales de la economía del país. Por lo tanto, las reducciones de tipos serían modestas y no se producirían hasta 2015.

En lo que respecta al crecimiento, tras la desaceleración del primer semestre del año, la economía podría recuperarse y aunque la mejora del PIB sería cercana a cero en 2014, podría llegar al 2% el año que viene.

REPRESALIAS

Este es el escenario más pesimista y en el que Rusia se “venga” de las sanciones de Occidente introduciendo medidas contra la Unión Europea (UE) y Estados Unidos. Ya se han adoptado algunas (incluida la prohibición de las importaciones de frutas y hortalizas procedentes de Polonia), pero esta visión implica acciones a mayor escala.

“Es cierto que parece poco probable que Moscú se defienda recortando sus exportaciones de petróleo y gas (principal preocupación para los líderes europeos), ya que los ingresos derivados de estas ventas son vitales para el país. No obstante, todavía hay cosas que el Kremlin puede hacer”. La más obvia es prohibir las importaciones de diversos productos de la UE y, en el peor de los casos, optar por una intervención militar abierta en el este de Ucrania.

En términos de impacto económico y de mercado, “mucho dependería de la magnitud de la venganza”, afirman desde Capital Economics. Pero cualquier paso en esta dirección tendrá un efecto dañino sobre el rublo y la renta variable rusa; lo que impactaría sobre la inflación y quizá obligará al banco central a subir aún más los tipos.

Este escenario implica costes significativos para la economía de Rusia que, en el corto plazo, podría caer en una profunda recesión, con la producción contrayéndose entre un 2% y un 3%. Quizá en 2015 repuntaría sobre la base de los estímulos económicos de las autoridades, pero más allá de eso, probablemente se estanque.

MANTENER EL “STATU QUO”

O lo que es lo mismo, Moscú no “mueve ficha” a la espera de que el conflicto se “muera” por sí mismo. Aunque probablemente esta situación derive en nuevas sanciones por parte de Occidente, éstas serían menos graves que en el escenario de “represalias”. Tanto el rublo como la bolsa rusa permanecerían bajo presión, pero el banco central no tendría que subir tipos, y la inflación debería comenzar a “aliviarse” a finales de 2014, permitiéndole incluso rebajarlos a partir de 2015.

Así, bajo este supuesto es poco probable un colapso completo de la economía rusa: el crecimiento se estabilizaría en la segunda mitad de 2014 y repuntaría un 1% aproximadamente el año que viene. De cara a los próximos dos ejercicios, con las sanciones prolongándose en un largo periodo de tiempo, la mejora del PIB se mantendría en el 1,5% o así.

Para Capital Economics, el primer escenario (“reducción de las tensiones”) es el más probable. “Sin embargo, según estas las cosas, los acontecimientos sobre el terreno” apuntan a que Moscú estaría endureciendo su postura. “Si esto sigue así, el coste económico para el país sólo aumentará y los mercados financieros podrían sufrir mucho más”, concluye.