Trichet no quiso entrar a valorar si este proceso se extenderá en las cajas de ahorros españolas, y abogó por solicitar moderación a los sueldos de los banqueros. "He enviado mensajes de moderación a todos los participes, no sólo a sindicatos, sino también a la patronal", afirmó.

Respecto de la actuación del Banco Central Europeo ante la que calificó de "grave" crisis financiera, Trichet descartó que el organismo monetario haya cometido errores.


"No podríamos decir algo así", señaló Trichet, quien aseguró que el BCE ya percibió dicha gravedad el 9 de agosto de 2007, cuando se aprobó una primera inyección de liquidez de más de 90.000 millones de euros para tranquilizar a los mercados de la crisis de las hipotecas "subprime".

En cualquier caso, sí reconoció que se debe acometer una reforma del sistema financiero "sin tabúes", en la que no se deje ninguna parcela de lado y se vea todo "en conjunto".

Matizó, sin embargo, que en este proceso no se pueden buscar "cabezas de turco" como las agencias de calificación ni "chivos expiatorios" como las autoridades gubernamentales.

A pesar de defender que no se les persiga como única causa de la crisis, sí criticó que las agencias de calificación tuvieran acceso a los activos reales y a la mezcla de esos activos y que el inversor final no pudiera disponer de esa información.

Al igual que un productor de whisky guarda el secreto de la receta, las agencias no decían cómo se hacía la mezcla, ejemplificó Trichet, una situación "inaceptable".

"No se pueden ocultar este tipo de cosas y no se pueden tomar decisiones sobre algo que no se conoce por completo", advirtió.

Según Trichet, ha habido instrumentos sofisticados que han oscurecido los activos y los distintos emisores no han utilizado los instrumentos de forma adecuada, lo que "ha disparado el problema de las subprime".

Por estos motivos, insistió en que no puede haber falta de conocimiento sobre lo que hay detrás de los mercados, "que se han multiplicado por diez" en los últimos años.

Ante los que reclaman un único regulador, el presidente del BCE se limitó a reiterar que, más que un solo regulador, lo que tiene que haber es coordinación entre las autoridades de vigilancia y subrayó que ya han participado "de forma activa" en este proceso.

En cuanto a la evolución del Euribor, que hoy seguía descendiendo y marcaba el 5,020 por ciento, Trichet se limitó a señalar que, para que siga bajando, el mercado todavía tiene que tomar "conciencia plena" de las medidas que ha llevado a cabo el BCE