De Tandt consideró que durante los dos fines de semana en que se tomaron ambas decisiones, el Gobierno actuó por fuerza mayor, por lo que no consultar a los accionistas no puede considerarse una irregularidad.
La alternativa a la venta hubiera sido que los accionistas se quedaran con las manos vacías, por lo que, según la presidenta del tribunal, en la situación financiera actual, suspender la venta "consecuencias irreparables", según la decisión.
Sin embargo, el tribunal sí aceptó que accionistas tienen el derecho a información correcta y por eso se designará a un consejo de expertos que investigará si los directivos de Fortis ha informado correctamente a los accionistas..
El director del bufete de abogados que planteó el caso en nombre de más de 2.000 accionistas, Mischaël Modrikamen, ya ha declarado que apelará la decisión de la presidenta.
El pasado 5 de octubre BNP alcanzó un acuerdo para hacerse con el 75 por ciento de los activos bancarios en Bélgica de Fortis, así como un 67 por ciento de los de Luxemburgo, mientras que ambos estados mantendrán las acciones restantes.
Bélgica recibirá a cambio nuevas acciones de BNP Paribas por valor de 8.250 millones de euros, lo que convertirá al Estado belga en el mayor accionista del grupo francés, con un 11,7 por ciento de los títulos.

