El presidente del Banco de la Reserva Federal de St. Louis, James Bullard, dijo que, si se asume que la recesión finalizó este verano, los aumentos en las tasas de interés podrían ocurrir bien entrado en el futuro. Esto ocurriría siempre y cuando la Fed opte por elevar las tasas entre dos años y medio y tres años después del fin de la recesión, como lo hizo en las dos últimas recesiones.  Sin embargo, Bullard advirtió que ese patrón es modificable, debido a que las autoridades del banco central son conscientes de los posibles errores en mantener las tasas de interés demasiado bajas por demasiado tiempo como -para muchos- fue el caso a mediados de esta década.


Bullard agregó que el mercado no parece tener una visión completa sobre la política monetaria, al centrarse demasiado en qué hace la Fed con las tasas de interés. "La atención del mercado sobre las tasas de interés es decepcionante, dado el relajamiento cuantitativo", sostuvo.


"El principal desafío para la política monetaria en adelante será cómo ajustar el programa de compras de activos sin generar inflación y aún seguir otorgando respaldo a la economía mientras las tasas de interés están cerca de cero", afirmó Bullard.

Los comentarios del funcionario fueron incluidos en un comunicado de prensa y una presentación entregados a la prensa en forma previa a un discurso en Missouri.

Bullard no es en la actualidad un miembro con derecho a voto del Comité de Mercados Abiertos de la Fed, pero lo será en el 2010.