No obstante, insistió en que las economías están más preparadas ahora para afrontar las dificultades y en los últimos quince años han ido adoptando una serie de medidas que van a permitir aguantar.Para Rato, no hay duda de que Estados Unidos "es el origen del problema de la actual crisis económica y sigue estando en el corazón de ese problema".Sin embargo, elogió la reacción "enérgica" de las autoridades de Estados Unidos, que reconoció que han hecho esfuerzos sustanciales y han adoptado medidas que calificó de "históricas".Según el ex ministro de Economía español, el problema para el resto del mundo no sólo se limita a las hipotecas "sub prime", sino que viene también de la mano de la debilidad del dólar en los últimos años.Este hecho dijo que ha provocado reacciones muy distintas en las economías de los países desarrollados y en las de las naciones emergentes.También llamó la atención sobre los efectos que ha tenido el aumento del precio de las materias primas y que ha provocado un cambio histórico en las tendencias comerciales.Rato explicó que el problema del sistema financiero es que se cambió el negocio de la banca tradicional debido a las nuevas tecnologías y se creó otro negocio que, a la postre, los mercados han decidido que no era válido porque no estaba acompañado de un sistema de supervisión adecuado.El ex director del FMI consideró que se está en una senda en la que va a haber un gran aumento del precio del dinero y las economías se van a ver muy afectadas, con recortes del crecimiento.Tras subrayar que la debilidad del dólar ha obligado a Europa a llevar el peso de la economía mundial en los últimos años, consideró que lo que ahora tiene que hacer la UE, y especialmente sus economías más avanzadas, es evitar lo que denominó una "segunda vuelta de la inflación".Rato defendió también la implantación del euro y subrayó que no tiene ninguna duda de que, para España, ha sido "un gran negocio" contar con esta moneda común.Por su parte, Mayor Oreja, en declaraciones a los periodistas, se refirió también a la crisis financiera internacional y a la actitud que está teniendo Europa ante ella para destacar el papel del Banco Central Europeo, que, a su juicio, está afrontando con realismo la crisis e impulsando la coordinación de las políticas de los diversos socios comunitarios.