Los precios mayoristas en Estados Unidos registraron en septiembre una caída por segundo mes consecutivo, principalmente debido a los descensos en los precios de la energía. Sin embargo, el índice básico, que excluye los alimentos y la energía, experimentó un inesperado aumento durante el mes, lo que podría agudizar la preocupación de que los incrementos anteriores en los precios de los alimentos, la energía y los bienes básicos han empezado a arraigarse en la economía en su conjunto. El índice de precios al productor para los bienes terminados
descendió un 0,4% en septiembre sobre una base ajustada por factores estacionales, informó el miércoles el Departamento de Trabajo. En agosto, el índice disminuyó un 0,9%. En relación con septiembre del 2007, el índice repuntó un 8,7%. El IPP básico -que excluye los precios de los alimentos y la energía- creció un 0,4%, sobre una base ajustada por factores estacionales, y ascendió un 4% en relación a un año antes, su tasa anual más alta desde febrero de 1991. Wall Street esperaba un aumento del 0,4% en el índice general y del 0,2% en el básico, según un sondeo de Dow Jones Newswires. Los precios de la energía registraron un descenso del 2,9% el mes pasado tras caer un 4,6% en agosto. Los precios mayoristas de la gasolina disminuyeron un 0,5%. Los precios de los alimentos, por su parte, ascendieron un 0,2% en septiembre. En tanto, los precios de los vehículos de pasajeros subieron un 0,5% el mes pasado.