El lunes, las bolsas de Estados Unidos escalaron alrededor de un 7 por ciento luego de que el Gobierno de Barack Obama reveló los detalles de un plan para limpiar los activos tóxicos de los balances bancarios, quitando un gran peso sobre el mercado y dándole al segmento de los bancos su mejor sesión en 16 años.

"Probablemente ayer (lunes) fuimos demasiado lejos, demasiado rápido, con toda la euforia que se creó", dijo Paul Mendelsohn, presidente de inversiones de Windham Financial Services.

"Hay mucha gente que no confía en esta escalada y va a tomar sus ganancias rápidamente (...) Creo que tenemos espacio suficiente para avanzar pero no lo haremos de un tirón", agregó.

El descenso de los precios del petróleo afectaba al sector de la energía. Los futuros del crudo estadounidense  retrocedían hasta los 53 dólares por barril, tras un alza de un 3 por ciento el lunes.

Las acciones de Exxon Mobil perdían un 1 por ciento, a 69,85 dólares, en las operaciones previas a la apertura del mercado.