El grupo francés Renault vendió 1.325.504 coches en el mundo en el primer semestre del año, un 4,3% más que en el mismo periodo de 2007 pese al estancamiento en Europa, su principal mercado. Renault, al anunciar hoy estos resultados, ha indicado que se dan las condiciones para continuar con el crecimiento en el segundo semestre, aunque no lo cifró y dejó sin confirmar así el objetivo de un aumento de al menos el 10% para el conjunto de 2008. En un comunicado se limitó a señalar que "su amplitud dependerá en gran medida de la evolución del entorno económico y financiero, todavía muy incierto por ahora, y de su impacto en los principales mercados automovilísticos, sobre todo en Europa y particularmente en Francia".
La progresión de las matriculaciones de la compañía francesa entre enero y junio se debió al buen comportamiento de sus marcas en los mercados emergentes (Latinoamérica, Asia, Africa, la antigua Unión Soviética y la cuenca mediterránea), que compensaron con creces el retroceso de ciertos países europeos clave.

