El Parlamento griego votó a favor de respaldar un paquete de recortes de gastos profundo que debe de alguna manera abrir un camino para la liberación de fondos y, potencialmente, un plan de rescate de la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional.

Algunos activos del gobierno griego serán privatizados y se reducirán los salarios del sector público
en un intento de que el déficit del país quede bajo control y evitar una suspensión de pagos. Todo ello para poder recibir el siguiente tramo de ayuda económica de parte del FMI y la UE.

El impopular paquete de austeridad prevé ahorrar 28 mil millones de euros a cinco años el paquete de con recortes de gastos y aumentos de impuestos