El informe asegura que la expansión de la economía se ha producido por el aumento del consumo en la mayor parte de esos distritos. Una demanda que han protagonizado dos industrias importantes, la automovilística y la de enseres relacionados con las mejoras en el hogar (para acceder al libro beige de la FED)


Precisamente hoy hemos conocido que
las ventas de automóviles crecieron un 17% el pasado mes de agosto en Estados Unidos, lo que supone el mejor mes para la industria desde junio de 2007. En total, en los últimos doce meses se han vendido alrededor de 16 millones de vehículos. (Ver noticia)


En cuanto al empleo, el informe dice que las empresas han mantenido la contratación en niveles parecidos o se ha incrementado modestamente. Hay que recordar que la tasa de desempleo es uno de los problemas de la economía estadounidense que más preocupa a la autoridad monetaria.

Los próximos 17 y 18 de septiembre, el Comité Federal del Mercado Abierto se reunirá para decidir si la recuperación económica es lo suficientemente sólida como para aguantar una reducción de los estímulos monetarios del QE3. En la actualidad, la FED gasta 85.000 millones de dólares en la compra de bonos soberanos y MBS (Mortgages Backed Securities).

Desde que se anunció la posibilidad del tapering, la rentabilidad del bono americano a 10 años ha subido desde menos de un 2% hasta el 2,895% en el que se ha situado después de conocerse este informe.

También han aumentado los tipos de interés de las hipotecas en este tiempo. Esto también ha impactado en la economía, ya que la FED asegura que se ha moderado el crecimiento en la concesión de hipotecas.