Iberia, por su parte, no tiene deuda y dispone de unos 2.000 millones en caja.
Las aerolíneas británica y española anunciaron en julio una fusión que se concretaría con intercambio de acciones, por valor de 3.160 millones de libras y cuyos términos aún están por definir.
Este miércoles Iberia anunció que su beneficio neto cayó un 79,5% en el tercer trimestre por el encarecimiento del combustible y la debilidad de la demanda en el mercado español.

