La transacción del paquete accionarial de ESSAL, cuyo beneficio neto el pasado ejercicio ascendió a 9,3 millones euros, se efectuó a un ratio Enterprise value/Ebitda superior a 11, "en línea con el de las últimas operaciones llevadas a cabo en el sector sanitario chileno", según Iberdrola.La eléctrica vasca entró en el capital de ESSAL en 1999, tras adquirir una participación del 51% a la Corporación de Fomento, dependiente del Ministerio de Industria chileno. ESSAL cuenta a día de hoy con 173.000 clientes y 328 empleados, y presta sus servicios a 33 localidades de las regiones Décima y Décimo Cuarta.La compañía enmarca esta operación dentro de su Plan Estratégico 2008-2010, que prevé desinversiones por más de 3.000 millones de euros por la venta de diversas participaciones en negocios considerados no básicos.A lo largo del primer trimestre de 2008, Iberdrola obtuvo unas plusvalías de 535,9 millones de euros, más elevadas que las inicialmente estimadas, por la venta de, entre otras participaciones, el 4% de la portuguesa GALP.La estrategia de la empresa para los próximos tres ejercicios incluye el comienzo de un nuevo ciclo inversor, en el marco del cual prevé destinar alrededor de 25.000 millones euros a crecer en el negocio energético básico, tanto en España como en el extranjero.Como consecuencia de las inversiones y del "progresivo incremento de la eficiencia", Iberdrola espera "más que duplicar" las principales magnitudes de su cuenta de resultados en 2010. Está previsto, en este sentido, que el beneficio neto supere los 3.500 millones de euros, cifra que supondrá multiplicar por 2,1 los 1.660 millones de euros obtenidos en 2006.