Una tónica que parece seguir en el presente curso, puesto que sus cuentas del segundo trimestre reflejan un beneficio neto atribuido de 2.051 millones de dólares (1.323 millones de euros), un 10,3% menos que en el mismo periodo de 2007, por encima de las estimaciones de Wall Street. Asimismo, la facturación de la entidad entre marzo y mayo ascendió a 9.422 millones de dólares (6.080 millones de euros), un 7,4% menos, lastrada por depreciaciones y ajustes por importe de 775 millones de dólares (500,5 millones de euros) en su división de renta fija.En este sentido, Goldman Sachs ha indicado que su unidad de banca de inversión facturó un 2% menos en el segundo trimestre, mientras que la división de 'trading' e inversiones sufrió un recorte del 16% en sus ingresos. Por su parte, la unidad de gestión de activos incrementó un 18% su cifra de negocio.El presidente y consejero delegado de Goldman Sachs, Lloyd C. Blankfein, ha mostrado su satisfacción con los resultados cosechados por el banco "dadas las dificultades del mercado"."Somos realistas respecto a los desafíos de mercado a los que nos enfrentamos, pero las tensiones en los mercados también crean oprtunidades y seguiremos aprovechándonos de las que aparazcan", ha dichoBlankfein.