El primer ministro francés, François Fillon, admitió hoy que los bancos franceses no están a salvo del riesgo sistémico porque algunos pueden tener "productos tóxicos", aunque destacó que ese riesgo es menor que en otros países europeos. "No estamos al abrigo de un accidente sistémico" debido a que "ciertos bancos pueden tener productos tóxicos en parte importante en su balance", señaló en una entrevista a la emisora de radio "RTL" Fillon, aunque consideró poco probable que las entidades financieras francesas recurran al dispositivo de salvamento. El pasado lunes el Gobierno francés aprobó, dentro del esquema concertado por el Eurogrupo el domingo,
un plan de hasta 320.000 millones de euros, de los cuales 40.000 millones para hacer frente a eventuales necesidades de capitalización de los bancos del país. Hoy el primer ministro señaló que "Francia ha estado menos concernida por quiebras bancarias que los otros países europeos, sin duda en razón de una supervisión francesa que ha sido más rigurosa".

