En el comunicado, Marchionne dijo que Fiat propuso un plan para Opel que limitará los costes sociales del proceso de integración y conllevará "importantes sinergias" derivadas de la compartición de plataformas, componentes y motores.
Marchionne también dijo que
Fiat no podía llevar a cabo la diligencia debida adecuada sobre las actividades de Opel porque no se le daba acceso total a las cuentas financieras de Opel, por lo que no le era posible presentar una propuesta de fusión adecuada y justa para General Motors como vendedor y para Fiat.
En cuanto a la "última ronda de peticiones" según la cual Fiat tendría que aportar fondos de urgencia a Opel mientras el gobierno alemán determina el momento y las condiciones exactos de la financiación provisional, Marchionne señaló que no era "razonable espera que Fiat aporte fondos".

