"Fiat no se retirará del acuerdo si no se ha completado para la fecha límite del 15 de junio", afirmó.

La juez Ruth Bader Ginsburg decidió el lunes que las órdenes judiciales de bancarrota que permiten la venta "quedan pendientes hasta nueva orden" suya o del Tribunal Supremo.

No está claro cuál sería el siguiente paso, pero muchos expertos interpretaron que la medida le da más tiempo al tribunal para decidir su respuesta a una petición de tres fondos de pensiones de Indiana y otros grupos para congelar el acuerdo

La operación...bloqueada

La operación, que ya había sido aprobada por el juez de un tribunal de quiebras el pasado 1 de junio, ha sido paralizada por la magistrada Ruth Bader Ginsburg, ante el recurso de apelación presentado por tenedores de deuda que consideran que la valoración de los activos de Chrysler es "demasiado baja".

Chrysler, en suspensión de pagos desde el 30 de abril, había pedido autorización al juez Arthur González para vender los activos de la empresa a una nueva compañía que estaría controlada por Fiat, una operación que cuenta con el beneplácito de la Casa Blanca.

La oposición a la venta de Chrysler está representada por tres fondos de pensiones del estado Indiana formados por antiguos empleados de la compañía tenedores de 42 millones de dólares (unos 30,4 millones de euros) de la deuda del constructor.

Cuatro de los magistrados del alto tribunal tendrán que celebrar ahora una votación a puerta cerrada para decidir si aceptan el recurso de apelación de los tres fondos de pensiones que solicitan bloquear la operación.